Nosotras somos memoria, festival escénico que conmemora la lucha feminista y los derechos de la mujer a través de las artes escénicas. Las propuestas que lo integran buscan mostrar un abanico escénico con relación a los temas de género y se realiza durante febrero, marzo y abril en las cinco sedes del Sistema de Teatros de la Ciudad de México: los teatros de la Ciudad Esperanza Iris, Benito Juárez, Sergio Magaña, el foro A Poco No y el Teatro del Pueblo, este último de recién incorporación al sistema.
El ciclo se presenta del 17 de febrero al 12 de abril, con motivo del Día Internacional de la Mujer, para reconocer la lucha histórica de las mujeres por la conquista de sus derechos.
22 propuestas escénicas multidisciplinarias con la finalidad de visibilizar la creación artística femenina, surgidas de un nutrido grupo de mujeres creadoras, donde no hubo una línea curatorial, ellas propusieron con toda libertad.
La programación incluye espectáculos de teatro, danza, música, multidisciplina, cabaret, propuestas para niñas y niños, así como stand up en los que se abordan temas como el amor, el retiro, la familia, las diferencias de género, la trata de personas, la desaparición forzada, la discriminación, el racismo, el sistema patriarcal, la sensibilidad, la empatía y el feminismo.
Las artistas, directoras, dramaturgas, bailarinas, coreógrafas, cantantes y músicas participantes, coinciden en la importancia de esta serie de trabajos escénicos que visibilizan el avance feminista en las diversas disciplinas artísticas.
El Teatro de la Ciudad Esperanza Iris abre sus puertas a espectáculos como Urdimbre, que se acerca al arte textil para mostrar cómo el maíz, el fuego, el agua, el algodón y las flores se volvieron hilos, música y danza. O Alejandra Ley, celebrando una Verbena Sorora.
El sábado 12 de marzo, la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México, ofrece un concierto con la participación de Cecilia Toussaint, Vivir Quintana y Leiden, mientras Jaramar compartirá su nuevo proyecto que recorre el mestizaje, la geografía el tiempo y la memoria titulado Todas las naves del mundo, el domingo 13 de marzo en el recinto de Donceles.
La pluma o la espada, una propuesta escénica de lucha feminista de Astrid Hadad, se refiere a Sor Juana Inés de la Cruz y la Monja Alférez. Ambas pertenecientes al Siglo de Oro español, presionadas por los designios de su época debido a su producción literaria. El evento se presentará el 19 de marzo en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris. El viernes 25 de marzo se escuchará Vivir, nací cantando. Vivir Quintana en concierto, una fusión de la música folk, regional y ranchera.
Cecilia Toussaint ofrecerá, el sábado 26 de marzo: El lado sur de mi corazón. CROMÁTICO, un recorrido musical que retoma los más recientes proyectos que ha realizado la artista, y el domingo 27, se presentará Viajando con Alexis de Anda, standupera que guiará un viaje de espiritualidad y comedia.
En el Teatro Benito Juárez, del 17 al 27 de marzo, se escenificará La certeza del amanecer.
En el Teatro Sergio Magaña, se presenta Gertrude, del 3 al 13 de marzo; Bioluminiscencia, del 17 al 27 de marzo y del 31 de marzo al 10 de abril se escenificará La alacena, documental miniatura sobre María Izquierdo, que aborda, desde la obra de la artista y muralista mexicana el panorama del arte nacional del siglo XX, así como el machismo operante en la escena cultural y la lucha feminista.
El Teatro del Pueblo abrirá sus puertas, los martes, del 22 de marzo al 12 de abril, con una temporada de La muerte chiquita, espectáculo que se centra en la historia de tres mujeres distintas, nominadas para concursar por el premio mayor.
En el Foro A Poco No del 3 al 13 de marzo, se presenta ECO, un diálogo interno con las mujeres antecesoras. En este mismo recinto se presentará 30+1 (obra para una actriz y un radio), del 17 al 27 de marzo, y Oliva Olivo, adicta a los patantes del 31 de marzo al 10 de abril.
Hemos tenido oportunidad de disfrutar de algunas de estas propuestas, como:
Gertrude, una mujer de Estado, soberana, estratega, política… también mujer imperfecta, apasionada, adicta. Reina de Dinamarca, madre, viuda, casada con el hermano de su esposo y acusada de traición por su hijo, Hamlet. Gertrude sube al escenario para confesarse, para tomar la palabra y hablar de sus actos y motivaciones. Después de 400 años, Gertrude está lista para confesarse
¿Qué hice yo, Hamlet, para que con tal aspereza me insultes?
William Shakespeare
Existen múltiples personajes que pueblan Hamlet: Claudio, Ofelia, Polonio o Laertes, algunas de las presencias de la tragedia existencialista, en la cual Gertrude toma parte. En esta ocasión, el público tiene la oportunidad de acercarse a la fragilidad de un complejo personaje, “a su hermosa naturaleza humana, a su femineidad enferma”.
Escrita y dirigida por Marisa Gómez, la puesta en escena cuenta con las espléndidas actuaciones de Itzia Zerón y Apolinar Salgado, las cuales muestran una mirada a la mujer detrás de la monarca.
La directora Marisa Gómez consideraba una tarea impostergable sumergirse en el mundo hamletiano y darle voz a la mujer que ostenta el poder. Reflexionar con ella acerca de los roles impuestos, ser esposa y madre, y descubrir si ella es cómplice, víctima o victimaria de su actual esposo. El espectador se sumerge en un laberinto de emociones y pensamientos confusos, en los que todos somos “enfermos” y podemos compartir con ella el dolor y la pasión; más allá de los títulos, el poder o la riqueza.
El público termina siendo espejo de esta mujer que busca explicaciones en un mundo que ella pensó gobernar y que la ha abatido. ¿Somos juguetes del destino? o ¿acaso construimos nuestra propia existencia?”.
El montaje surgió en el marco de la celebración de los 400 años del nacimiento del dramaturgo William Shakespeare, en 2016, su directora Marissa Gómez estrenó Gertrude, a partir de Hamlet, en la casa Rafael Galván de la Universidad Autónoma Metropolitana, que fue la institución que auspició el montaje.
Para mí, en general la obra de Shakespeare, pero Hamlet en particular, afirma Marisa Gómez, ha sido una obra de mucho trabajo y de mucho estudio durante muchos años, estoy obsesionada con sus personajes. Entonces, me parecía muy interesante que Gertrudis, que finalmente es quien desata toda la tragedia al casarse con Claudio, hablara tan poco en la obra y tuviera tan pocas oportunidades de mostrar quien era y qué era lo que le pasaba. De pronto pensé en la necesidad de escucharla, fue por ello que decidí plantear la estación terapéutica en donde ella pudiera plantear temas tan contemporáneos, a partir de una situación tan concreta como que esta. Traté, en términos de dramaturgia, que en esta sesión terapéutica fuera donde pudiera mostrar quien es, sin ningún tapujo, contar su versión de la historia, y al mismo tiempo fuera tan contemporáneo a partir de una situación, de una situación tan concreta como que está enferma; es alcohólica.
Traté en términos de dramaturgia, de insertarlo en esta historia que nos plantea Shakespeare, en el momento en el que ella sale, sin saberlo, casi como en un presentimiento, para llegar al duelo y morir. Es también la última oportunidad que uno tiene de poder estar con ella, de poder escucharla y saber qué es lo que le pasa.
En este acercamiento a Gertrudis, reina y madre de Hamlet, su creadora hace uso de proyecciones de video para contar la historia, porque la imagen proporciona mucha información, poner el final en el video, le parece indispensable.
Como ya se comentó, el estreno de la obra, hace 6 años, fue en una casa, por lo que hay opciones para presentar la obra, ahora, en un escenario a la italiana. Para la dramaturga la intervención de los espacios resulta esencial ya que posibilita generar la magia de la ficción en cualquier lugar. Ninguna obra que ha dirigido Gómez, está cerrada, siempre tiene la flexibilidad para adaptarse a dónde pueda presentarse y a donde haya alguien que quiera mirarla. La intervención de los espacios le resulta fascinante, la posibilidad de poder generar la magia de la ficción en cualquier lugar, y no estar constreñida a que tenga que ser un escenario a la italiana, un telón, para la también directora, esto tiene que ver con el desarrollo de las artes escénicas en el mundo.
A mí me gusta mirar a los ojos al espectador, ha comentado Gómez, y yo los veo a los ojos a través de los actores. Entonces necesito su cercanía y necesito saber que el mensaje, no el mensaje moralino y ético, sino el momento en el que yo, como ser humano, comparto el tiempo contigo que estás ahí, y ahí es donde, para mí, ocurre la magia.
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Por su parte, Alejandra Ley y sus amigas tomaron por asalto el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris con el fin de celebrar a la vida y producir un intercambio de miradas y saberes.
Juntas con la misma voz y al unisonó gritaron ¡Que comience la Verbena! una fiesta llena de música, stand up, cabaret, danza, artes visuales y más que se llevó a cabo el domingo 6 de marzo, en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris.
La Verbena Sorora, fue una fiesta en la que la talentosa y multifacética actriz, cantante, conductora, standupera y artivista Alejandra Ley reunió a grandes exponentes artísticas para celebrar la vida en el marco del ciclo Nosotras Somos Memoria.
La fiesta estuvo dirigida a todas las personas, sin distinción de ninguna índole, con el objetivo principal de gritar con total libertad que “Vivas estamos, y vivas nos queremos“, así como mostrar la gran labor de las artistas independientes, para generar la creación de espacios comunitarios de colaboración creativa, que fomenten la inclusión de mujeres con diversidad funcional y/o que formen parte de la comunidad LGBTTT+.
Las invitadas a la fiesta de Alejandra Ley fueron Las Pinups y Escarlata, en la parte musical; Astrid Hadad, en Cabaret; Ana Julia, Jey Aderith y Eliza Sonrisas, en Stand up; Paulina Pulido, en Danza; Lutrec, Fher Val y Krystel Rascón, en la Ilustración; así como las fotógrafas Brenda Islas y Annel Guzmán.
Hubo grandes sorpresas con la presencia de personalidades como Carolina Hernández, Herly, Alessandra Rojo De la Vega y La Fatshionista, entre otras.
La Verbena Sorora es un festival feminista, que tiene el objetivo de volverse periódico, informo Ley, incluyente, con muchas mujeres, y artistas transgénero, muy talentosas, que surgió con la idea de darle a las mujeres un espacio en el que puedan mostrar su talento en diversas áreas artísticas.
El teatro es de todos. ¡Asista!.
Gertrude. Dramaturgia y dirección: Marisa Gómez.
Actuación: Itzia Zerón y Apolinar Salgado.
Jueves y viernes 20 horas, sábado 19 horas y domingo 18 horas.
Teatro Sergio Magaña, Sor Juana Inés de la Cruz 114, colonia Santa María La Ribera, Metro San Cosme, hasta el 13 de marzo.
Los boletos se pueden adquirir en la taquilla del teatro y en el sistema Ticketmaster. $185 General.
Jueves de 2x1 al comprar en línea.
El aforo se mantiene al 75 por ciento y para el ingreso tanto el personal como el público atienden las medidas sanitarias: uso permanente de cubrebocas, toma de temperatura y aplicación de gel antibacterial.
Verbena sorora. Una fiesta de Alejandra Ley.
Autoría: Alejandra Ley y Claudia Silki.
Dir. Alejandra Ley.
Elenco: Jey Aderith, Eliza Sonrisas, Ana Julia, Artaller, Escarlata, Astrid
Hadad, Las Pinups y Alejandra Ley.
Cía. Alejandra Ley y sus amigas
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